Todo es relativo

HACIA MUCHO FRIO LA REP..........!!!
Y sí. Al grito de impotencia le sigue un temblor corporal cuando recuerdo aquellos días en Munich, Berlín o Heidelberg. Aquellas jornadas de vano calzoncillo largo, de gorros, de vinchas y bufandas. Y luego, el milagro de ver el termómetro por la manana y festejar que el mercurio superó el grado CERO! Hace calor decíamos...

Cómo que aca no hay carne?

Hay de todo! Salchichas, salchichas blancas, negras, verdes, rosas, a lunares, carne de vaca, de cerdo, fiambre, jamón crudo, cocido, mediocrudo, casicocido, salchichas como queso, pato, conejo, siervo, leberwurst, leberwurst gris, salame, salamín, salaminesitos, pavo, pollo, hasta argentinisch steak!... interminable lista.
Pasen y vean...



Qué? Un buen asado? Eso escasea, mejor dicho, eso no existe por estas tierras. Eso envidian los que probaron un pequeno mordisco de la carne argentina. Eso extranamos los domingos al mediodía.

Die Sonne

Varias semanas en Alemania me llevaron a comprender la importancia de recibir la luz del sol cada día. Especialmente de poner la cara en dirección a él, cerrar los ojos, y absorver la mayor cantidad de calor posible.
En los días grises, que podían durar más de una semana seguida, decidí jugar con el sol en cuanto tuviese la oportunidad. Así, cada vez que el sol salió, perfeccioné un procedimiento que pasaré a explicar a continuación.
En primer lugar, usando solo dos dedos, preferentemente el índice y el pulgar, se toma al astro por uno de sus rayos. Luego se lo coloca en el cielo, muchas veces es conveniente utilizar algunas nubes de relleno para lograr la mística atmósfera del atardecer. A continuación, luego de rastrear algún objeto bonito como una persona, alguna torre de castillo, o simplemente una montana común y corriente, se procede a ubicarlo entre el sol y uno mismo. Así, se produce un destello de luz que duele un poco. Al cabo de unos segundos es posible levantar la vista y ver como aquel objeto se sonríe entre las cosquillas de luz.
Lo más increíble es la sonrisa que a uno mismo se le dibuja en la cara. Una sonrisa como la tuya.

Fränkische Natur

Oberdürrbach, el lugar donde Verena creció, es hogar de suaves colinas vestidas de nieve en invierno y de verde en verano. Allí, las largas caminatas en la tarde, cuando el sol ya se oculta, pueden significar perderse por un rato en una naturaleza que no cabe en la mirada.


Esta descripción, que puede asemejarse a un folleto turístico o incluso pecar de empalagosa, no es más que lo que sentí y aprecié en los días que pasamos en aquellos hermosos campos a las afueras de Würzburg.

Memoria selectiva

Nos topamos con una ciudad de nombre impronunciable. Luego de envidiar la elegancia de dos cisnes negros que paseaban en el río, nos aventuramos al interior de la metropoli de veinte cuadras de superficie total.
En el fondo de aquel conjunto de casitas y comercios ordenados prolijamente a ambos lados de la calle principal, yacía la casa de verano del duque-ovispo de Würzburg. La modesta construcción de solo 48 habitaciones ostentaba con orgullo miles de adornos de oro y diamante que brillaban hasta en la escoba del último conserje. Alfombras y espejos, en el piso y en el techo, almacenaban polvo y recuerdos de la vida acaudalada del gobernante de turno.
Los inmensos jardines de estilo francés rodeaban al edificio. Y en medio de ellos, un hermoso estanque que en algún momento habrá sido hogar de patos y gansos, de peces y pavos reales.
Que pena que el olor espantoso proveniente de ese viejo estanque desvanezca toda la imagen y solo nos quedase una asociación en el cerebro. Que pena que solo recuerde la casa del ovispo y el aroma a mierda.

Meine kleine Hexe

Ella, además de hermosa, es mágica...

Industria Argentina

Este es el senor Sebastián Cozzarín quien me envió este increíble regalo para que no extrane mucho a mi querida República Argentina. Gracias pibe!

La medieval Rothenburg

Típica de la edad media: Muralla alrededor, iglesias y catedrales por demás, museo de instrumentos de tortura y ejecución, cervecería debajo de la Rathaus (intendencia), mercado de navidad, castillo y residencia del duque...

Ah, me olvidaba! Contingente de japoneses sacando fotos sin cesar con un moderno auricular en una de sus orejas que les permite escuchar a la guía a diez metros de distancia. Típica de la edad... media (en inglés...).

Cocacuola? o qué? o cómo?

El senor Veleiro, es decir, mi amigo Nicolás, ha remarcado en más de una ocasión la incapacidad de Verena de pronunciar correctamente el nombre de una famosa marca de bebida gaseosa. El hecho ha sido motivo de risas y burlas, al punto que Verena se encargó de filmar el siguiente documento que testifica y confirma que Nicolás tenía razón.

Se me cruzó un chino!

Si eso, se me cruzó un chino, mejor dicho, un japonés, y me arruinó la foto... aunque... ahora que lo pienso, me arruinó la foto realmente?

Más que mil palabras

Heidelberg fue una de las ciudades más bonitas que visitamos. Realmente no se si fue por el manto blanco de nieve o por la ciudad en si misma, pero parecía que ese día había algo especial en el aire.
Como no tengo respuesta, mejor dejo que las imágenes ocupen el lugar de las palabras...

Los muchachos per.......

Todavía quedan algunos carteles de la campana electoral... Pero no pensé que me iba a encontrar con uno tan lejos!!! En Bad Kissingen, en el medio de Baviera!

Mal gusto o pague la diferencia

Bad Taste Party. No hace falta traducción alguna, basta con ver la foto y comprender que en dicha fiesta se enarboló la bandera de "mecagoenlaelegancia". La consigna era sencilla: Si ibas vestido normal la entrada era de 5 euros. Y si te sumabas a la liga de los despojados de verguenza, aquella descendía a los accesibles 2 euros y medio. En fin, lo que sobraba fue para cerveza, que evidentemente resultó necesaria para nublar la vista y bailar sin asustarse.

TBA? Metropolitano? Deutsche Bahn?

Luego de un día de caminatas por el Deutsches Museum, el Pinakothek der Moderne (Un museo de arte moderno), y gran parte de la Altstadt (La parte antigua de la ciudad) de Munich, nos dirigimos a la Hauptbahnhof (Estación de tren principal). La idea era volver a Bamberg en las supuestas tres horas que duraría el mismo según la bonita planilla de horarios que confecciona la Deutsche Bahn con un ano de anticipación.
SIN EMBARGO...



El tren no tuvo piedad con nosotros, los inocentes pasajeros, y nos obligó a esperar en varias estaciones que la máquina decidiera continuar. Si, leyeron bien, el malo del tren no quería seguir, o al menos eso entendimos luego de escuchar el mensaje del maquinista por los altavoces del vagón: "Senores pasajeros, el tren todavía no está en condiciones de comenzar/continuar con el viaje. Les rogamos tengan paciencia".
A dicha frase le seguía una más corta pero aún mas dolorosa: "Salimos en cinco minutos". Y al escucharla deviene una catarata de sensaciones encontradas: Lo primero que surge es la sensación de que están insultando nuestra inteligencia; a ella le sigue una leve esperanza de que realmente estén diciendo la verdad; y a continuación, el propio intelecto nos propina un sopapo al razonar la imposibilidad de que eso sea cierto, ya que es la tercera o cuarta vez que lo dicen.



Finalmente llegamos... 5 horas después... nos esperaba una bonita llovizna, 2 o 3 grados bajo cero, y algunas cuadras más para recorrer en bicicleta.

La famosa Munich

München es el nombre en alemán de esta famosa ciudad, capital del Bundesland Bayern. Allí tuvimos el agrado de ser recibidos por Martin, un ex-vecino de Verena, que nos brindo comida y techo.


La gente de Munich dice que a pesar de su importante tamano, esta ciudad no deja de ser un pueblo, bastante grande, pero pueblo al fin. Y así es como lo viven, sosteniendo muchas de las tradiciones propias del sur de Alemania, entre millares de turistas que la invaden cada día.


Este "pueblo" también tiene su lado ostentoso, digamos... a lo puerto Madero, donde uno se siente raro, paseando entre vidrieras que hospedan miles de euros con forma de anillo, collar, tapado o una simple cena con vino y postre.

Y pegamos la vuelta nomás...

Estimados!
Cuánto hace que no escribo aca! Espero sepan disculpar la falta de actualización de esta humilde publicación virtual. El asunto es que anduve paseando por algunas ciudades algo alejadas de Bamberg, con lo cual internet se volvió escaso y, para ser explícitos, caro. Con Verena hicimos una bonita recorrida por Berlin, Hamburg y Amsterdam, con algunas paradas en medio, de las que pronto me encargaré de relatarles.
Lamentablemente, tenemos un inconveniente con internet en Bamberg ahora, ya que "O2" (lo que vendría a ser una especie de Arnet-telefónica o algo por el estilo) no funciona de lo mejor, de hecho... no funciona. Digamos que el drama de las privatizaciones es igual en cada lugar del mundo... la famosa mano invisible de la oferta y la demanda sigue metiéndose en los bolsillos de los ingenuos clientes... Adam Smith y la connnn.... bueno, el no tenía la culpa, el escribió algo hace 200 anos. Que ahora algunos delincuentes con logo lo usen para justificarse, y que a muchos les guste creerselo... es otro tema.
Bueno, me fui al demonio. Los dejo con una bonita imagen de Bamberg, donde un poquito de sol salió a dar la cara, casi con verguenza.
Los quiere, Franco.